Partido con gran expectación entre dos aspirantes al título a priori que se decidió en los primeros minutos del primer tiempo en los cuales los locales se consiguieron distanciar ampliamente en el marcador y supieron mantener la distancia durante todo el mismo.
Ante la novedad del horario (Domingo 11 am) y del pabellón (interior del complejo) no se sabía muy bien cómo nos iba a sentar, aunque francamente a peor era bastante difícil teniendo en cuenta dónde jugábamos anteriormente.
El equipo salió bastante lanzado y con muy buena definición de cara a gol ya que prácticamente todos los lanzamientos iban dentro. Por otra parte los camargueses no tenían buenas elecciones de lanzamiento debido a la intimidación de la defensa montañesa y a su propia espesura mental.
Con todo esto, se consiguió llegar al descanso con un colchón importante de 8 goles (20-12), que todo el mundo pensaba que iba a ser suficiente pero nadie se quería relajar porque contra camargo nunca se sabe.
El segundo tiempo empezó con una tónica diferente, un intercambio de goles en los primeros compases para convertirse después en un festival de la exclusión. Raro era el momento en el que nuestro equipo jugaba con los 6 en pista (lamentable). Aún así el equipo siguió mateniendo la distancia en el marcador con más o menos problemas, sufriendo en exceso en ocasiones la reubicación de Jos como pivote contrario.
Momento digno de mención fue la expulsión de este último mediada la segunda parte en un acto de picardía de Zubi, que fingió una interceptación de saque central dentro de la galleta, lo cual supuso la tercera exclusión de este gran berraco que enloqueció y empezó a destrozar el mobiliario, llámese banquillo de madera, y la gente empezó a huir despavorida XD. Bueno, ahora en serio, este acto de locura no llegó a más y "pacíficamente" se dirigió hacia el vestuario.
A raíz de este instante se produjo una relajación por nuestra parte y un festival de paradas excepcionales de Llata, al cual como viene siendo habitual le sientan bien los partidos después de una gran cogorza, y en los últimos diez minutos creo recordar que no encajó un sólo gol, haciendo paradones desde todos los puestos.
Destacar la ineptitud arbitral como costumbre ya en todos mis comentarios y la gran capacidad anotadora que desplegamos en el primer tiempo, consiguiendo un gran colchón al descanso que nos vino de lujo para ir administrándolo en el segundo tiempo.Lamentar la lesión de un ex-compañero de Montaña, Rodri, que a los 10 segundos de su entrada sufrió un esguince de tobillo fortuito que le hizo abandonar. También es de destacar la ausencia de Merino en los visitantes pero creo que los hubiésemos ganado de igual manera. Esperemos que no sea un espejismo y podamos soñar con algo más ete año. AUPA MONTAÑA.